Daria mi vida por fundirme en tus labios tan solo un instante.

Esto es una jodida mierda. Necesito pasar página, necesito olvidarme de ti. Se que para ti no significó nada, y si lo hizo, muy poco, pero no me importa. Para mi fue importante. Fuiste el primero que consiguió que me muriera de ganas de que llegara el día en el que por fin te vería, el que me provocaba esos impulsos que me hacían ahogarte a abrazos y besos. El primero que me hizo sonreír de otra forma, una forma más especial. Echo de menos esa felicidad, despertarme cada mañana sabiendo que piensas en mi, aunque sea de vez en cuando. Que me hables y ponerme nerviosa. Echo de menos que me vaciles, vacilarte... hasta que te rías de mi.Se que pasas de mi cara y que esto que escribo puede parecer exagerado, pero a decir verdad, lo necesito. Necesitaba decirlo de alguna manera, y aquí está. Me mata saber que probablemente ni te acuerdes de que existo, o que ni siquiera cuentas con que yo todavía pienso en ti. En fin, así sois los hombres, supongo. Tal vez no todos, pero sí todos los que se han cruzado en mi vida. Aparecen, te dicen cosas bonitas, te hacen sentir diferente, consiguen hacerte totalmente suya y al poco tiempo... se aburren. Y se van. Todos se van. Siempre se van. Como todo el mundo. La historia de mi vida.